El Triple Crimen de Alcasser¿Verdad o mentira de Estado? |
|
El 27 de enero de 1993, dos apicultores encontraron los cadáveres de tres niñas semienterrados en las cercanías del pantano valenciano de Tous. Los cuerpos que ya se encontraban en estado de putrefacciónporque llevaban tres meses enterrados pertenecían a Miriam García, Antonia (Toñi) Gómez y Desirée Hernández, desaparecidas el 13 de noviembre de 1992 en Alcàsser, cuando se dirigían a la discoteca Coolora la que iban habitualmente en la localidad vecina de Picassent. Al parecer hicieron auto-stop y el coche que les paró llevaba a gente que presumiblemente conocían, según atestigua una vecina que las vio subir al coche con tranquilidad (no forzosamente). Esta mujer fue la última que las vio con vida sin contar a sus asesinos y aún recuerdo la imagen de la señora, asomada a su ventana, señalando con el dedo hacia una calle, dónde fueron recogidas.
Cuando se dio a conocer la terrible noticia del triple crimen de Alcásser, yo no podía creer lo que oía, y tampoco que aquello hubiera ocurrido tan cerca de mi casa. Las niñas asesinadas eran menores que yo, pero ellas habían hecho lo mismo que hice yo años atrás: auto-stop para ir a una discoteca. Era típico hacerlo… a partir de ese crimen abobinable, nadie haría auto-stop en Valencia con tanta ligereza –quizás, incluso, nadie más lo haría-. A mi memoria llegaron imágenes de las veces que subí en coches de gente desconocida, las veces que me arriesgué sin miedo a dejar que un tipo al que no había visto jamás me llevara a la discoteca o de vuelta a casa… tenía la misma edad que ellas cuando fueron asesinadas, pero en aquel entonces no teníamos aún miedo. A partir de entonces, todo cambió.
Toñi, Desirée y Miriam, quinceañeras, eran unas crías con toda la vida por delante: pensar en chicos, acabar los estudios y bailar en la discoteca era lo lógico a su edad. Un día fueron encontradas, y el estado en que se encontraron sus cuerpos provocó los terrores más absolutos en nuestro país, y cuanto más cerca estábamos de Alcásser, más pavor sentíamos. No nos fiábamos de nadie, éramos parados en vigilancias policiales en la carretera (a mí me pararon una noche en que buscaban a Antonio Anglés por mi pueblo), daba miedo tener un cierto aire físico al supuesto asesino de las niñas… En fin, se produjo un pánico y una paranoia general.
Las tres niñas se hicieron famosas, desgraciadamente, por sus fotos, imágenes sin vida. Los culpables –o al menos así se aseguraba- eran Antonio Anglés (con antecedentes de violencia y penales), su amigoMiquel Ricart (igualmente delincuente, un atracador entre otras cosas) y algunos familiares más de Anglés (en principio). Pero aquella investigación fue un verdadero lío, un despropósito tras otro, donde igual se culpaba a Anglés y Ricart directamente que se decía que eran ‘tapaderas’ para no descubrir a los verdaderos asesinos de Toñi, Miriam y Desirée.
Antonio Frontela, el prestigioso médico forense que vio los cadáveres de las niñas, no dudó en decir en voz alta que en aquella investigación “se perdían los papeles y las pruebas”. Esto llevó a Fernando, el padre de Míriam, a luchar más activamente por la verdad, pero antes de que nos diésemos cuenta mucha gente ya estaba en contra de Fernando (al que se le acusó de un delito por estafa) y de su mano derecha, un periodista llamado Juan Ignacio Blanco. Ninguno de los dos salieron bien parados. Pero me he ido de nuevo por las ramas, y es que el triple crimen de Alcásser no es sencillo.
Estos son los supuestos asesinos:
Nacido en Sao Paulo, Brasil, tenía 35 años cuando sucedió todo. Desapareció antes de que cantara el gallo, imposible cazarlo, sin embargo se supo rápidamente que este tipo había tenido secuestrada, encadenada y apaleada a una ex novia, Nuria Pera, según su hermana ‘Kelly’, toxicómana (por este hecho cumplió 6 años de condena en la cárcel y precisamente fue el testimonio de su “gran amigo Ricart” el que lo encarceló).
Su madre, Neus, cargada de hijos, trabajó deslomándose en lo que podía para mantener a su familia. A cambio tenía hijos conflictivos que entraban y salían de cuarteles de policía, trapicheaban con droga, se ganaban la vida con prostitución o la golpeaban.
Antonio huyó ante los ojos de la policía. Se habló mucho de ello, de la facilidad con la que había huído, eso mosqueó al país entero. Pero no fue el único investigado. Su hermana ‘Kelly’, dedicada a la prostitución, su hermano pequeño Mauricio, delincuente común, y otro de sus hermanos,Enrique, éste retrasado, fueron investigados.
Las pruebas que dieron con él fueron principalmente un papel médico que se encontró donde estaban los cadáveres. En este papel estaba el nombre de Enrique Anglés (hermano investigado de Antonio), e inicialmente se acudió a su casa para interrogarlo a él. Foto familiar de los Anglés, Neus a la izquierda y 3 de sus hijos. Al lado, Kelly Anglés
Su amigo de fiesta y trapicheos, cuyo coche contenía pelo perteneciente a las niñas. Ricart llevaba años viviendo con la familia de Anglés y el día que le detienen iban a buscar a Enrique (el inicial sospechoso) pero al ser preguntado si tenía un coche blanco y contestar que sí, la Guardia Civil se hace cargo de él como posible sospechoso.
Ese día en cuestión la Guardia Civil se presenta en casa de los Anglés, llaman a la puerta, no les abren, y además desde dentro atrancan la puerta. En ese momento Antonio Anglés sale huyendo por una ventana con, según su madre, dos millones de pesetas que había pedido prestados para comprar una casa. La Guardia Civil vuelve con una orden de registro, consigue que le abran la puerta y la madre, Neus, dice que está sorda y no había oído cómo llamaban antes a la puerta, pero confiesa que vio salir a su hijo huyendo con el dinero. Así fue como Antonio Anglés desapareció para siempre y Miquel Ricart se convirtió en el único encarcelado del triple crimen de Alcásser. Los padres de las niñas con carteles con las fotos de sus hijas
Esos papeles terminaron saliendo a la luz, y leerlos producía escalofríos. Las niñas eran llamadas CADAVER Nº UNO, CADAVER Nº DOS y CADAVER Nº TRES.
Cada vez que intento leerlos –y van años intentándolo- termino angustiada, aterrorizada e indignada. El cadáver nº 1 pertenecía a Toñi, y entre otras aberraciones la habían violado analmente con objetos.
En resumidas cuentas, estas fueron las conclusiones:
1.- Las características generales del cadáver y las ropas y objetos personales encontrados en el mismo se corresponden con las de ANTONIA GOMEZ RODRIGUEZ.
2.- La muerte ha sido violenta.
3.- La muerte se produjo por destrucción de centros vitales encefálicos.
4.- Dicha destrucción de centros vitales encefálicos se produjo como consecuencia de una herida por arma de fuego.
5.- Dicha herida por arma de fuego tiene las siguientes características :
- Orificio de entrada a nivel temporoparietal izquierdo, con morfología elíptica de 1.3 x 0.9 centímetros.
- Trayectoria en la cavidad craneal de detrás a delante, de izquierda a derecha y ligeramente descendente.
- Alojamiento del proyectil en lámina orbitaria derecha del hueso frontal.
- No es posible precisar absolutamente la distancia desde la que fue efectuado el disparo con los datos obtenidos en el examen macroscópico, si bien cabe descartar el disparo a boca de jarro (el que se realiza con la boca de el arma en contacto con la piel).
6.- En el cadáver aparecen múltiples lesiones de tipo contusivo, fundamentalmente a nivel de plano posterior del mismo y extremidades. La mayoría de estas lesiones presentan claros signos de reacción vital.
7.- En el cadáver aparece una pronunciada dilatación anal compatible con la introducción de un objeto o parte anatómica a través de dicho orificio en vida o postmortem.
8.- El cadáver presenta signos de haber sido atadas las manos mediante un lazo no blando, dicha atadura debió producirse antes del fallecimiento.
9.- Los datos obtenidos del estudio de la evolución de los fenómenos cadavéricos, hacen compatible el establecimiento de una data de la muerte de al menos dos meses.
El cadáver nº 2 pertenecía a Desirée
Los forenses igualmente investigaron su cuerpo y no se diferenciaba mucho del de Toñi. También la mataron de un tiro después de torturarla violentamente.
Conclusiones forenses:
1.- Las características generales del cadáver y las ropas y objetos personales encontrados en el mismo se corresponden con las de MARIA DESEADA GONZALEZ FOLCH.
2.- La muerte ha sido violenta.
3.- La muerte se produjo por destrucción de centros vitales encefálicos.
4.- Dicha destrucción de centros vitales encefálicos se produjo como consecuencia de una herida por arma de fuego.
5.- Dicha herida por arma de fuego tiene las siguientes características:
- orificio de entrada a nivel occipital, en la línea media, 2.5 centímetros sobre protuberancia occipital externa. Tiene morfología redondeada, con dimensiones de 1 x 1 centímetro.
- trayectoria en la cavidad craneal de detrás a adelante, muy ligeramente descendente y desviado hacia la izquierda.
- orificio de salida del disparo está situado a nivel de pared interna de órbita izquierda.
- no es posible precisar la distancia desde la que fue efectuado el disparo, con los datos del examen macroscopico, si bien cabe descartar el disparo a boca de jarro ( el que se realiza con la boca del arma en contacto con la piel).
6.- En el cadáver aparecen múltiples lesiones de tipo contusivo, fundamentalmente a nivel del plano posterior del mismo y extremidades. Las características de la mayoría de estas lesiones sugieren la producción de las mismas en vida.
7.- La colección hemática que aparece en la región dorsal del cadáver, a nivel de la 10 dorsal inmediatamente a la izquierda de la columna vertebral se corresponde topográficamente y esta en relación con los orificios de la parte posterior de la camiseta que portaba la víctima.
8.- en el cadáver aparece signos de amputación traumática del pezón y areola derecha. Las características de los bordes de la amputación traumática son compatibles con la intervención de arma blanca, si bien no puede descartarse la actuación de mecanismos de tracción.
9.- En el cadáver aparecen signos de violencia de tipo sexual a nivel vaginal.
10.- En el cadáver aparece una muy pronunciada dilatación anal compatible con la penetración de un objeto o parte anatómica a través de dicho orificio en vida o postmorten.
11.- Los datos obtenidos del estudio de la evolución de los fenómenos cadavéricos, hacen compatible el establecimiento de una data de la muerte de al menos dos meses.
El Cadáver nº 3 era, lógicamente, Míriam, la hija de Fernando.
1.- Las características generales del cadáver y las ropas y objetos personales encontrados en el mismo se corresponden con las de MIRIAM GARCIA IBORRA.
2.- La muerte ha sido violenta.
3.- la muerte se produjo por destrucción de centros vitales encefálicos.
4.- Dicha destrucción de centros vitales encefálicos se produjo como consecuencia de una herida por arma de fuego.
5.- Dicha herida por arma de fuego tiene las siguientes características.
- orificio de entrada a nivel de la unión occipitoparietal izquierda, unos 2 centímetros por encima y 5 centímetros por dentro de la apófisis mastoides. La morfología es redondeada, con diámetro de 1 centímetro.
- la dirección es de detrás adelante, de izquierda a derecha y ligeramente ascendente.
- el orificio de salida está situado a nivel temporoparietal derecho, con dimensiones de 1.1 x 1.2 centímetros.
- no es posible precisar la distancia desde la que fue efectuado el disparo, con los datos del examen macroscópico, si bien cabe descartar el disparo a boca de jarro (el que se realiza con la boca del arma en contacto con la piel).
6.- En el cadáver aparecen múltiples lesiones de tipo contusivo. Estas lesiones presentan claros signos de reacción vital.
7.- En el cadáver aparecen signos de agresión sexual a nivel vaginal, con lesiones externas y, sobre todo, internas, que indican la introducción de un objeto provisto de filos o aristas en la cavidad vaginal, muy probablemente después de la muerte.
8.- La muy pronunciada dilatación anal, junto con la presencia de alteraciones perianales y en la mucosa rectal, serían compatibles con la existencia de agresión sexual a este nivel.
9.- Los datos obtenidos del estudio de la evolución de los fenómenos cadavéricos, hacen compatible el establecimiento de una data de la muerte de al menos dos meses. Una de las muchas imágenes de su padre, Fernando García. Sólo leyendo los informes vemos que los ASESINOS fueron brutales con ellas, da vergüenza y pavor, vergüenza saber que los asesinos no estén cumpliendo condena –que debería ser la de ojo por ojo, o si nos ponemos estupendos porque no queremos estar a su altura, que se dediquen a "trabajar" para la sociedad construyendo carreteras o en las minas, o asumiendo una cadena perpetua (y nada de pedir segundos y tercer grados)-, y pavor conocer que sólo está Ricart en prisión y que del resto no se sabe nada.
La vergüenza
|
La vergüenza vino de la mano de una periodista que casi hunde su carrera al hacerse cargo de un programa especial sobre el crimen de las niñas de Alcásser, en Alcásser mismo. Micrófono en mano y esperando a que la gente llorase ante las cámaras, ella insistía para que el morbo fuera más poderoso. Algunos mirábamos la tele con los ojos como platos preguntándonos ¿por qué no se aparta y la deja llorar en privado? ¿por qué no cortan la transmisión? ¿qué coño están haciendo...?, pero según la periodista ella recibía ‘órdenes’. Cierto o no, aquel fue el episodio de la vergüenza de un programa que jamás debió salir al aire o que, en caso de hacerlo, no debía haber primado en ningún momento el morbo. Y no fue el único.
Resumiendo
La cuestión es que en Valencia asesinaron a 3 niñas con nombre y apellidos, y también mataron lentamente a sus familiares, que jamás han podido recuperarse de estas atrocidades. Después de estos estudios forenses los familiares pidieron una segunda opinión y fue el profesor Frontela quien se hizo cargo, sin embargo no recibió todas las partes de los cuerpos, por lo que sus informes terminaron siendo incompletos, algo que hizo constatar él mismo y que llamó muchísimo la atención de la gente. Se podía recalcar de sus informes que las muertes fueron homicidas y violentas. Las niñas fueron cruelmente torturadas antes de morir y a Miriam, por ejemplo, le pegaron el tiro en la cabeza cuando ya estaba agonizante después de tanta tortura. Las lesiones de naturaleza sádica nos hacían ver que no estábamos a salvo en nuestra ciudad, y eso creó el terror.
Y el terror no paró ahí… de pronto se nos dijo que Ricart –el único encarcelado por el triple crimen- no era uno de los asesinos, sino que era una ‘tapadera’ para encubrir a los verdaderos psicópatas, que tanto a él como a su familia y a la familia de Anglés se les estaba pasando un dinero para callarles la boca, que a Antonio Anglés se lo habían cargado, o que había sido visto en Brasil, o que lo vieron tirarse por la borda de un barco, que el papel que incriminó a los Anglés lo pusieron los verdaderos asesinos… Ninguna de estas informaciones tranquilizaron a los ciudadanos.
Hoy por hoy sigue siendo un misterio. Se desmontaron testimonios de testigos, jamás se ha encontrado a Anglés, su hermana ‘Kelly’ y su madre se contradicen constantemente en sus declaraciones (ahora sí estaba Antonio, ahora no, y siempre dicen lo mismo, lo malo malísimo que era y el miedo que le tenían –y no lo dudamos, según declaraciones Anglés golpeaba a su madre hasta hacerle saltar los dientes), Ricart cambia de testimonio según le dé… y para más INRI este tipo tuvo la desfachatez de pedir el segundo grado para salir de prisión. El día que Ricart salga a la calle, espero que Valencia entera –si no España- se eche a la calle (sin violencia, pero sí para exigir a los jueces que recapaciten y RECUERDEN que los violadores se portan bien en la cárcel porque no tienen niñas a las que violar). Y si él es realmente una tapadera, que cumpla su condena íntegra O HABLE. Estar ahí dentro es culpa suya, ya sea por haber participado en el triple crimen o por callarse lo que otros aseguran que ocurrió (pues se ha hablado de gentes de alto nivel que secuestraban niñas para divertirse con ellas o para rodar snuff-movies… nunca nos han dado un respiro al respecto, jamás entenderé las ganas que tienen de arraigar el terror en la ciudadanía con mensajes confusos).
Por cierto, Antonio Anglés 'cometió' los delitos tras fugarse de la cárcel, es decir que la policía no le buscó -pues vivía en su casa con su familia- cuando estaba en "Busca y Captura", y teniendo en cuenta que los delitos en nuestro código penal prescriben a los veinte años y él ya está más de diez años desaparecido... si volviera a aparecer como Pepito Palotes y dijera "Soy Anglés" dentro de 9 años, este hombre no sería acusado de sus crímenes.
Y otro por cierto que nos hace dudar más... a Miquel Ricart se le concedió inicialmente el segundo grado cuando los informes de los profesionales de la penitenciaría eran contrarios a la concesión de estos privilegios.
Para quien tenga interés en conocer este caso profundamente y saber por qué hay quien cree que lo de Ricart y Anglés es una gran mentira, recomiendo visitar esta página de EL PALLETER.
http://webs.demasiado.com/elpalleter/ El periodista de sucesos Juan Ignacio Blanco, que acompañó a Fernando -el padre de Miriam- durante 5 años intentando descubrir la verdad, acabó con una pena de cárcel por decir algo respecto de un Teniente Coronel en el programa de Pepe Navarro (finalmente no ingresó en prisión); curiosamente no mintió. Recomiendo que no os perdáis la entrevista (imperdible) en los Enlaces Externos (más abajo) realizada a Juan Ignacio Blanco. Curiosamente le recuerdo siempre muy nervioso, y en cambio en esta entrevista se le ve más sereno. Imagino que ya se habrá dado cuenta de que él siempre estuvo en peor posición porque no se le había muerto nadie.
El pueblo se volcó en el entierro de las tres niñas
|
Con vuestro permiso, no pongo ninguna imagen del dolor de los padres -que las hay- porque sigo sufriendo cuando las veo, de igual forma que se me pone la piel de gallina y siento frío cada vez que veo los vídeos sobre las niñas.
Estatua tributo a las tres niñas de Alcásser
|
Nota: Durante mucho tiempo me he negado a escribir sobre este caso porque no está nada claro y aún me hierve la sangre al ver que no está resuelto, sin embargo no encuentro mejor forma de luchar porque se siga investigando que volver a sacarlo a la luz. Cuento con muchos lectores, y confío en ellos para que hagan presión. Además, quisiera que los familiares de las niñas de Alcásser sepan que aún hay quienes no olvidamos que ellos sufren, y que ellas "existieron". Somos muchos quienes nos negamos a olvidarlas. Kruela. |
© Kruela |
No hay comentarios:
Publicar un comentario